Todos conocemos el consejo del médico. Es importante beber suficiente agua a lo largo del día – de lo contrario, sufrirás los síntomas de la deshidratación. Pero, con lo ocupados que estamos todos, es fácil simplemente… bueno, olvidarse. Tanto es así que es un propósito de Año Nuevo muy común entre la gente el de acordarse de beber más agua – puede que nunca sientas sed, así que te olvidas, y por eso ese primer vaso de agua se queda a medias a lo largo del día. Sin embargo, hay síntomas extraños de sed que puede que no notes a lo largo del día, lo que demuestra que necesitas beber un poco más de agua a lo largo del día.
Yo soy una de esas personas que incluye «beber agua» en mi lista de tareas diarias. Es fácil mirar más allá -o a través- del cristal transparente de tu escritorio con todos esos correos electrónicos entrantes que acaparan tu atención. Y no es que nadie se dedique regularmente a devorar bolsas de pretzels extra salados para sentirse desesperado por tragar dos litros de agua en menos de cinco minutos (por favor, no lo hagas, no es sano). Sin embargo, no es necesario correr una maratón o hacer una excursión por el Sahara para estar motivado para mantenerse hidratado, sólo hay que escuchar al cuerpo. Independientemente de cómo nos sintamos, nuestro cuerpo podría estar tratando de llamar nuestra atención con otras señales de que necesita reponer el H2O esencial. Sintoniza con tu cuerpo y mira si tal vez necesitas pasar a ese segundo vaso de agua ahora mismo.