Alargamiento de los huesos largos
La placa epifisaria es la zona de crecimiento de un hueso largo. Es una capa de cartílago hialino donde se produce la osificación en los huesos inmaduros. En el lado epifisiario de la placa epifisiaria se forma el cartílago. En el lado diafisario se osifica el cartílago, lo que permite que la diáfisis crezca en longitud. La metáfisis es la parte ancha de un hueso largo que se encuentra entre la epífisis y la estrecha diáfisis. Se considera una parte del cartílago de crecimiento: la parte del hueso que crece durante la infancia y que, a medida que crece, se osifica cerca de la diáfisis y la epífisis.
La placa epifisaria está compuesta por cuatro zonas de células y actividad.
- La zona de reserva, la región más cercana al extremo epifisario de la placa, contiene pequeños condrocitos dentro de la matriz. Estos condrocitos no participan en el crecimiento óseo; en cambio, fijan la placa epifisaria al tejido óseo de la epífisis.
- La zona proliferativa, la siguiente capa hacia la diáfisis, contiene pilas de condrocitos ligeramente más grandes. Crea continuamente nuevos condrocitos a través de la mitosis.
- La zona de maduración e hipertrofia contiene condrocitos de mayor edad y tamaño que los de la zona proliferativa. Las células más maduras están situadas más cerca del extremo diafisario de la placa. En esta zona se acumulan lípidos, glucógeno y fosfatasa alcalina, lo que provoca la calcificación de la matriz cartilaginosa. El crecimiento longitudinal del hueso es el resultado de la división celular en la zona proliferativa junto con la maduración de las células en la zona de maduración e hipertrofia.
- La zona de matriz calcificada, la más cercana a la diáfisis, contiene condrocitos que están muertos porque la matriz que los rodea se ha calcificado. Los capilares y los osteoblastos de la diáfisis penetran en esta zona. Los osteoblastos segregan tejido óseo sobre el cartílago calcificado restante. Así, la zona de matriz calcificada conecta la placa epifisaria con la diáfisis. Un hueso crece en longitud cuando se añade tejido óseo a la diáfisis.
Después de la zona de matriz calcificada, se encuentra la zona de osificación, que en realidad forma parte de la metáfisis. Las arterias de la metáfisis se ramifican a través de las trabéculas recién formadas en esta zona. El tejido óseo recién depositado en la parte superior de la zona de osificación se denomina esponja primaria. El hueso más antiguo situado en la parte inferior de la zona de osificación se denomina esponjosa secundaria.
Los huesos siguen creciendo en longitud hasta el inicio de la edad adulta, con un ritmo de crecimiento controlado por las hormonas. Cuando los condrocitos de la placa epifisaria dejan de proliferar y el hueso sustituye al cartílago, el crecimiento longitudinal se detiene. Lo único que queda de la placa epifisaria es la línea epifisaria.
