¿Qué es la filogenia?
Los biólogos estiman que hay entre 5 y 100 millones de especies de organismos viviendo en la Tierra hoy en día. Los datos morfológicos, bioquímicos y de secuencias genéticas sugieren que todos los organismos de la Tierra están relacionados genéticamente, y las relaciones genealógicas de los seres vivos pueden representarse mediante un vasto árbol evolutivo, el Árbol de la Vida. El árbol de la vida representa la filogenia de los organismos, es decir, la historia de los linajes de los organismos a medida que cambian en el tiempo. Implica que las diferentes especies surgen de formas anteriores por vía de la descendencia, y que todos los organismos, desde el microbio más pequeño hasta las plantas y los vertebrados más grandes, están conectados por el paso de los genes a lo largo de las ramas del árbol filogenético que une toda la Vida (Figura 1).
Figura 1: Todos los organismos están conectados por el paso de genes a lo largo de las ramas del Árbol filogenético de la Vida.
Los organismos que hoy están vivos no son más que las hojas de este gigantesco árbol, y si pudiéramos rastrear su historia por las ramas del Árbol de la Vida, nos encontraríamos con sus antepasados, que vivieron hace miles o millones o cientos de millones de años (Figura 2).
Figura 2: Los organismos vivos se sitúan como hojas en las puntas de las ramas del Árbol de la Vida. Su historia evolutiva está representada por una serie de ancestros que son compartidos jerárquicamente por diferentes subconjuntos de los organismos que están vivos en la actualidad.
La noción de que toda la vida está conectada genéticamente a través de un vasto árbol filogenético es una de las nociones más románticas que han surgido de la ciencia. Qué maravilloso es pensar en el ancestro común de los humanos y los escarabajos. Lo más probable es que este organismo fuera una especie de gusano. En algún momento, esta especie de gusano ancestral se dividió en dos especies de gusanos separadas, que luego se dividieron una y otra vez, y cada división (o especiación) dio lugar a nuevos linajes que evolucionaron de forma independiente. Poco podían saber estos gusanos, hace cientos de millones de años, que algunos de ellos acabarían evolucionando hasta convertirse en escarabajos, mientras que sus hermanos y hermanas acabarían siendo humanos o jirafas.
Los organismos han evolucionado a lo largo de los tiempos desde formas ancestrales hasta formas más derivadas. Los nuevos linajes suelen conservar muchos de sus rasgos ancestrales, que luego se modifican gradualmente y se complementan con rasgos novedosos que les ayudan a adaptarse mejor al entorno en el que viven. El estudio de la filogenia de los organismos puede ayudarnos a explicar las similitudes y diferencias entre plantas, animales y microorganismos. El Árbol de la Vida proporciona, pues, un marco riguroso para guiar la investigación en todas las subdisciplinas biológicas, y es, por tanto, un modelo ideal para la organización del conocimiento biológico.