Buddy Guy

Buddy Guy, cuyo nombre original es George Guy, (nacido el 30 de julio de 1936, en Lettsworth, Luisiana, EE.UU.), músico de blues estadounidense, conocido por sus cortantes riffs de guitarra eléctrica y sus apasionadas voces. Fue un prolífico intérprete y artista discográfico desde finales de la década de 1950 hasta bien entrado el siglo XXI, y disfrutó de un resurgimiento de la popularidad a partir de la década de 1990.

Guy se fabricó su propia guitarra a los 13 años y aprendió a tocar por sí mismo intentando reproducir los sonidos de bluesmen como John Lee Hooker que escuchaba en la radio. Empezó a tocar en clubes de Baton Rouge (Luisiana) cuando aún era un adolescente y en 1957 se fue a Chicago. Allí fue descubierto por el gran bluesista Muddy Waters, que le ayudó a encontrar trabajo en el 708 Club, donde conoció a otros bluesistas legendarios, como B.B. King y Willie Dixon. En 1960-67 grabó varios éxitos para el sello Chess, como «Leave My Girl Alone» y «Stone Crazy». También trabajó como sideman para artistas como Howlin’ Wolf, Little Walter y Koko Taylor.

En los años 70 y 80 Guy siguió grabando y actuando a menudo con el armonicista de blues Junior Wells, pero fue víctima de la creciente popularidad de la música rock. No fue hasta que los músicos blancos más jóvenes -entre ellos Eric Clapton, Stevie Ray Vaughn, Keith Richards y Jeff Beck- reconocieron su deuda con Guy y otros bluesmen que su fortuna empezó a subir de nuevo. En la década de los 90 grabó varios álbumes ganadores del Grammy, como Damn Right, I’ve Got the Blues (1991), Feels Like Rain (1993) y Slippin’ In (1994). En 2003 Guy lanzó su primera grabación de blues acústico, Blues Singer, y ganó otros Grammys por sus álbumes Living Proof (2010), Born to Play Guitar (2015) y The Blues Is Alive and Well (2018). Fue incluido en el Salón de la Fama del Blues en 1985 y en el Salón de la Fama del Rock and Roll en 2005. Además, Guy fue honrado en 2003 con la Medalla Nacional de las Artes. En 2012 fue nombrado homenajeado por el Kennedy Center, y en 2015 recibió un premio Grammy por los logros de su vida.

Además de su trabajo como músico, Guy fue propietario de dos renombrados clubes de blues en Chicago: el Checkerboard Lounge (1972-85) y (desde 1989) el Buddy Guy’s Legends.

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