Antecedentes de la pregunta
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y la bronquitis crónica son enfermedades respiratorias de larga duración. Provocan síntomas como falta de aire, tos y exceso de esputo. Las personas con EPOC y bronquitis crónica pueden sufrir brotes (exacerbaciones) cuando sus síntomas empeoran.
Los mucolíticos son medicamentos que se toman por vía oral y que pueden aflojar el esputo, facilitando su expulsión. Los mucolíticos pueden tener otros efectos beneficiosos sobre la infección e inflamación pulmonar y pueden reducir el número de reagudizaciones que tienen las personas con EPOC y bronquitis crónica. Los mucolíticos también pueden ser inhalados, pero no se analizaron los mucolíticos inhalados en esta revisión.
Características de los estudios
Se buscaron estudios de al menos dos meses de duración, en los que se decidió al azar si una persona recibía un fármaco mucolítico o un placebo. No se incluyeron estudios en los que participaran niños o personas con otras afecciones respiratorias como el asma y la fibrosis quística.
Encontramos 38 estudios para incluir en nuestra revisión. Estos estudios incluyeron un total de 10 377 adultos con EPOC o bronquitis crónica. Los estudios utilizaron una variedad de fármacos mucolíticos, incluidos la N-acetilcisteína, la carbocisteína y la erdosteína, y tuvieron una duración de entre dos meses y tres años. Los mucolíticos se tomaron por vía oral entre una y tres veces al día. Estos estudios midieron varios resultados diferentes para averiguar si el fármaco era útil, incluyendo las reagudizaciones, los ingresos hospitalarios, la calidad de vida, la función pulmonar y los efectos secundarios.
Resultados clave
Se descubrió que las personas que tomaban fármacos mucolíticos eran menos propensas a experimentar una reagudización en comparación con las que tomaban placebo. Aproximadamente ocho personas tendrían que tomar el fármaco durante nueve meses para que una persona más no tuviera una reagudización. Este resultado se basó en 28 estudios en los que participaron 6.723 personas. Sin embargo, los estudios realizados hace más tiempo (de los años 70 a los 90) muestran un mayor beneficio que los realizados más recientemente. Los estudios más cortos también parecían mostrar más beneficios que los más largos. Esto podría deberse a que los ensayos más recientes eran más amplios y podrían mostrar que los mucolíticos son menos beneficiosos de lo que mostraban los estudios anteriores. O podría ser que sólo los estudios que mostraban que los mucolíticos eran beneficiosos se publicaron antes de la década de 2000, cuando se presionó para informar de todos los resultados de los ensayos, independientemente de si mostraban o no beneficios.
Las personas que tomaban mucolíticos tenían menos días de discapacidad (es decir, días en los que no podían realizar sus actividades normales) cada mes, pero se trataba de una diferencia bastante pequeña: menos de medio día por persona al mes. También tuvieron aproximadamente un tercio menos de probabilidades de ser ingresados en el hospital, aunque este resultado se basa en sólo cinco estudios que proporcionaron esta información.
Los resultados de los estudios sugieren que los mucolíticos no tienen un impacto importante en la calidad de vida o la función pulmonar. Las personas que tomaron mucolíticos no experimentaron más efectos secundarios no deseados que las que tomaron placebo. Pero no pudimos estar seguros de su impacto en la muerte durante el periodo de estudio porque sólo se produjeron 37 muertes entre los 3.527 participantes de los estudios en los que se midieron y notificaron las muertes.
Calidad de la evidencia
Tenemos una confianza moderada en los resultados que hemos presentado. Nuestra confianza se ve reducida por los resultados de los estudios individuales que parecen bastante diferentes entre sí y la mezcla de estudios más antiguos y más recientes que encontramos. Además, en algunos casos no había suficientes datos para estar seguros de si los mucolíticos eran mejores o peores que el placebo, o lo mismo.
Conclusiones
Los mucolíticos parecen ser útiles para reducir los brotes, los días de incapacidad y los ingresos hospitalarios en personas con EPOC o bronquitis crónica, y no parecen causar más efectos secundarios. Sin embargo, no parecen tener mucho impacto en la calidad de vida o en la función pulmonar, y no se pudo asegurar su impacto en la muerte.
Este resumen en lenguaje sencillo está actualizado hasta abril de 2019.