Contaminación lumínica

«El sol, la luna y las estrellas habrían desaparecido hace mucho tiempo… si hubieran estado al alcance de las manos humanas depredadoras»
– Havelock Ellis, La danza de la vida, 1923

Hace menos de 100 años, todo el mundo podía mirar hacia arriba y ver un espectacular cielo nocturno estrellado. Ahora, millones de niños de todo el mundo nunca experimentarán la Vía Láctea donde viven. El uso creciente y generalizado de la luz artificial por la noche no sólo perjudica nuestra visión del universo, sino que afecta negativamente a nuestro medio ambiente, nuestra seguridad, nuestro consumo de energía y nuestra salud.

¿Qué es la contaminación lumínica?

La mayoría de nosotros estamos familiarizados con la contaminación del aire, del agua y de la tierra, pero ¿sabías que la luz también puede ser un contaminante?

El uso inapropiado o excesivo de la luz artificial -conocido como contaminación lumínica- puede tener graves consecuencias medioambientales para los seres humanos, la fauna y nuestro clima. Los componentes de la contaminación lumínica incluyen:

  • Deslumbramiento – brillo excesivo que causa molestias visuales
  • Resplandor del cielo – brillo del cielo nocturno sobre zonas habitadas
  • Intrusión de luz – luz que cae donde no se pretende o no se necesita
  • Desorden – brillante, agrupaciones confusas y excesivas de fuentes de luz
Diagrama de la contaminación lumínica

La infografía anterior ilustra los diferentes componentes de la contaminación lumínica y cómo es una «buena» iluminación. (Imagen de Anezka Gocova, en «The Night Issue», Alternatives Journal 39:5 (2013). Haga clic para ampliar.

La contaminación lumínica es un efecto secundario de la civilización industrial. Sus fuentes incluyen la iluminación exterior e interior de los edificios, la publicidad, las propiedades comerciales, las oficinas, las fábricas, las farolas y los recintos deportivos iluminados.

El hecho es que gran parte de la iluminación exterior utilizada por la noche es ineficiente, demasiado brillante, mal orientada, mal apantallada y, en muchos casos, completamente innecesaria. Esta luz, y la electricidad utilizada para crearla, se desperdicia derramándola hacia el cielo, en lugar de enfocarla hacia los objetos y áreas reales que la gente quiere iluminar.

Glosario de términos de iluminación

¿Qué tan mala es la contaminación lumínica?

Con la mayor parte de la población de la Tierra viviendo bajo cielos contaminados por la luz, el exceso de iluminación es una preocupación internacional. Si vives en una zona urbana o suburbana, todo lo que tienes que hacer para ver este tipo de contaminación es salir por la noche y mirar al cielo.

Según el innovador «Atlas mundial del brillo artificial del cielo nocturno» de 2016, el 80 por ciento de la población mundial vive bajo la luz del cielo. En Estados Unidos y Europa el 99 por ciento del público no puede experimentar una noche natural!

Antes y durante el apagón del noreste de 2003, un corte de energía masivo que afectó a 55 millones de personas. Cortesía de Todd Carlson

Antes y durante el apagón del noreste de 2003, un apagón masivo que afectó a 55 millones de personas. Foto de Todd Carlson

Si quieres averiguar la gravedad de la contaminación lumínica donde vives, utiliza este mapa interactivo creado a partir de los datos del «Atlas Mundial» o del Blue Marble Navigator de la NASA para ver a vista de pájaro las luces de tu ciudad. Los usuarios de Google Earth pueden descargar una superposición creada también a partir de los datos del «Atlas Mundial». Y no olvides consultar los datos del mapa interactivo de contaminación lumínica Globe at Night, creado con ocho años de datos recogidos por científicos ciudadanos.

Navegador Blue Marble de la NASA

Navegador Blue Marble de la NASA

Mapa de contaminación lumínica de Globe at Night

Mapa de contaminación lumínica de Globe at Night

Efectos de la contaminación lumínica

Durante tres mil millones de años, la vida en la Tierra existió en un ritmo de luz y oscuridad creado únicamente por la iluminación del Sol, la Luna y las estrellas. Ahora, las luces artificiales dominan la oscuridad y nuestras ciudades brillan por la noche, alterando el patrón natural día-noche y cambiando el delicado equilibrio de nuestro entorno. Los efectos negativos de la pérdida de este recurso natural inspirador pueden parecer intangibles. Pero cada vez hay más pruebas que relacionan el brillo del cielo nocturno directamente con impactos negativos medibles, entre los que se incluyen

  • Aumentar el consumo de energía
  • Alterar el ecosistema y la vida silvestre
  • Perjudicar la salud humana
  • Afectar a la delincuencia y la seguridad
  • La contaminación lumínica afecta a todos los ciudadanos. Afortunadamente, la preocupación por la contaminación lumínica está aumentando drásticamente. Un número creciente de científicos, propietarios de viviendas, grupos ecologistas y líderes cívicos están tomando medidas para restaurar la noche natural. Cada uno de nosotros puede aplicar soluciones prácticas para combatir la contaminación lumínica a nivel local, nacional e internacional.

    Puedes ayudar!

    La buena noticia es que la contaminación lumínica, a diferencia de muchas otras formas de contaminación, es reversible y cada uno de nosotros puede marcar la diferencia. No basta con ser consciente de que la contaminación lumínica es un problema; hay que actuar. Puedes empezar por minimizar la luz de tu propia casa por la noche. Puedes hacerlo siguiendo estos sencillos pasos.

    • Aprende más. Echa un vistazo a nuestras entradas del blog sobre Contaminación Lumínica
    • Sólo utiliza la iluminación cuando y donde sea necesario
    • Si la seguridad es una preocupación, instale luces con detector de movimiento y temporizadores
    • Apantallar adecuadamente todas las luces exteriores
    • Mantener las persianas bajadas para mantener la luz en el interior
    • Conviértase en un ciudadano científico y ayude a medir la contaminación lumínica
    • Aprenda más sobre Conceptos Básicos de Iluminación Exterior

      Luego corra la voz entre sus familiares y amigos y dígales que lo transmitan. Mucha gente no sabe o no entiende mucho sobre la contaminación lumínica y los impactos negativos de la luz artificial por la noche. Si eres un embajador y explicas los problemas a los demás, ayudarás a concienciar sobre este problema creciente e inspirarás a más personas a tomar las medidas necesarias para proteger nuestro cielo nocturno natural. La IDA tiene muchos recursos valiosos para ayudarle, incluyendo materiales de divulgación pública, cómo hablar con su vecino, ordenanzas de iluminación e iluminación residencial y comercial.

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