Como podemos ver, el mundo está en una urgencia extrema para frenar el ritmo del cambio climático mediante el ahorro de agua, la preservación de la vida silvestre, y la plantación de más y más árboles. Sin duda, los árboles tienen inevitablemente un papel importante para frenar la progresión del calentamiento global. Si la destrucción masiva y la deforestación continúan, perjudicarán al planeta al sacrificar los beneficios a largo plazo de los árboles por ganancias a corto plazo.
¿Por qué son importantes los bosques?
Los bosques cubren alrededor del 30% de la superficie mundial. Sin embargo, están desapareciendo a un ritmo alarmante. Según las estadísticas publicadas por el Banco Mundial, el mundo ha perdido 1,3 millones de kilómetros cuadrados, lo que equivale a 502.000 millas cuadradas de bosque, entre 1990 y 2016; esta superficie es mayor que la de Sudáfrica. Además, según un estudio publicado en Nature Journal, el 46% de los árboles han sido talados desde que el ser humano comenzó a talar los bosques primarios. Alrededor del 17% de la selva amazónica ha sido destruida en las últimas cinco décadas, y la pérdida está aumentando de forma exponencial.
Impactos de la deforestación
No hay que pensar en la necesidad de los árboles por diversas razones. Lo menos que podemos pensar es que son el absorbente más significativo del dióxido de carbono que exhalamos y de los contaminantes que se crean a través de los invernaderos y de muchas actividades mecánicas que se emiten. Estos gases nocivos entran en nuestra atmósfera y aumentan el calentamiento global. Evitar la deforestación es la única tendencia que los científicos prefieren ahora para llamar a un impacto práctico en el cambio climático. Según un valor estimado, los árboles tropicales cubren por sí solos el 23% de la mitigación del clima, que se necesita durante la próxima década para cumplir con los objetivos de preservación del medio ambiente establecidos en 2015 por el Acuerdo de París para la Protección del Medio Ambiente.
Cinco soluciones para que la deforestación cambie nuestro futuro
A continuación, las cinco posibles soluciones para evitar la deforestación que pueden cambiar nuestro futuro:
1. Colaboración
La industria forestal no sólo puede proporcionar a los mercados locales e internacionales valiosos productos forestales, sino que también puede emplear a cientos de personas en las comunidades locales de diferentes regiones del mundo. Las partes interesadas de la industria papelera también pueden asumir la responsabilidad de gestionar de forma sostenible y cuidadosa las fuentes de extracción de estos bosques sin comprometer las economías locales e internacionales. Hay muchas ONG y organizaciones que trabajan en colaboración, como GreenPeace, First Nations y Stand Earth, para salvar el planeta reduciendo la deforestación. Por lo tanto, colaborar de manera eficaz y eficiente puede servir a la tierra de una mejor manera y prevenir la deforestación.
2. El poder del mercado
Si las grandes empresas tienen la fuerza de destruir los preciosos bosques del mundo, también tienen el poder y la capacidad de salvarlos. Muchas industrias y empresas pueden apoyar la prevención de la deforestación haciendo procedimientos operativos estándar de «deforestación cero» para limpiar sus procesos de fabricación, cadena de suministro y comercialización. También pueden hacer hincapié en el uso de productos reciclados. Por lo tanto, investigar, confrontar y exponer estos abusos ambientales por parte de diferentes corporaciones puede ayudar a tomar las acciones necesarias en tiempo real para proteger tanto a los empleados como a los bosques.
3. Apoyar a los pueblos indígenas
Los bosques han sido el hogar de muchos pueblos indígenas durante miles de años. Hay muchas pruebas que demuestran los derechos de los pueblos nativos a muchas tierras tradicionales y donde se protege y respeta la autodeterminación. Los bosques les acompañan como parte integral de su cultura. Sin embargo, los gobiernos y las empresas pasan por alto y pisotean intencionadamente sus derechos con frecuencia. Apoyar a esas comunidades indígenas y defender sus derechos, junto con muchas ONG auténticas, es una forma poderosa de poner de relieve estos problemas sociales y de evitar que haya tierras tradicionales intactas como el Amazonas.
4. Promover el trabajo sostenible
Cualquiera puede marcar la diferencia en algún nivel contribuyendo a la lucha para salvar los bosques y la vida silvestre tomando decisiones informadas a diario. Utilizar productos ecológicos, comer alimentos sostenibles, reciclar más y conservar el agua y la energía puede ayudar a conducir hacia la deforestación cero.
5. Cambiar las políticas
Si queremos detener la deforestación a gran escala, necesitamos que los gobiernos de todo el mundo formen parte de ella. Tenemos que acabar con la corrupción y garantizar la aplicación de políticas de conservación de los bosques basadas en los últimos avances científicos. Es necesario un compromiso global para reducir las emisiones de efecto invernadero y propuestas innovadoras con financiación internacional para salvar los bosques tropicales. Todos estos esfuerzos juntos proporcionarán un incentivo eficaz para mejorar continuamente los programas de protección de los bosques.
Conclusión
Como se ha mencionado anteriormente, hay muchas medidas que afectan negativamente a la deforestación en nombre del progreso y el desarrollo. También hay muchas formas de detener la deforestación por el bien de nuestro clima y del medio ambiente. Un número considerable de organizaciones se está dando cuenta de la necesidad de los árboles como parte esencial para salvar el planeta. Sin embargo, hay partes interesadas influyentes que obtienen beneficios y generan ingresos sin tener en cuenta los efectos peligrosos para la tierra. Las cinco formas anteriores son sólo parte de un largo viaje que todos los habitantes de la tierra tienen que emprender para salvar el planeta, mientras que si se aplican correctamente, pueden tener un impacto positivo significativo y pueden ayudarnos a beneficiarnos a largo plazo.
Bio del autor: John William es un apasionado escritor y activista social. Ha trabajado con diferentes ONGs desde hace una década para servir y preservar el medio ambiente. Actualmente, John trabaja como escritor de contenidos en Australian Master.