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Tenemos tanto que agradecer en esta vida, todos y cada uno de los días. Pero la realidad es que a veces las constantes exigencias de la vida, las luchas y las preocupaciones dan más espacio a la derrota que a un corazón agradecido. O nos olvidamos, en medio del ajetreo y las presiones, de hacer una pausa y dar gracias, por todo lo que Dios ha hecho, y sigue haciendo en nuestras vidas.
A veces es realmente un sacrificio ofrecer alabanzas y agradecimientos. Puede que no tengamos ganas. Estamos luchando. Estamos cansados. O tal vez, sentimos que Él nos ha defraudado. Pensamos que Dios parece distante, como si estuviera lejos, o que realmente no le importa lo que nos preocupa. Es posible que golpes dolorosos de la vida y pérdidas nos hayan hecho caer en espiral recientemente.
Pero esto es lo que puede marcar una diferencia duradera. Tenemos la opción, cada día, de darle las gracias. Y con un corazón de acción de gracias, nos damos cuenta de que no importa lo que enfrentemos, Dios no sólo trabaja para cambiar nuestras situaciones y ayudarnos a superar nuestros problemas. Él hace más. Cambia nuestros corazones. Su poder, a través de corazones agradecidos y mentes enfocadas en Él, libera el control que nuestras luchas tienen sobre nosotros. Somos fortalecidos por Su paz, repostados por Su alegría.
La Palabra de Dios está llena de muchos recordatorios de lo poderoso y vital que puede ser un corazón agradecido en este mundo.
El poder de un corazón agradecido, 7 cosas que puede hacer:
– Quita nuestros ojos de nosotros mismos, y nos ayuda a centrarnos de nuevo en Dios.
– Nos recuerda que no tenemos el control, sino que servimos a un Dios Poderoso que sí lo tiene. Nos mantiene en un lugar de humildad y dependencia de Él, ya que reconocemos lo mucho que le necesitamos.
– Nos ayuda a reconocer que tenemos mucho que agradecer, incluso todas las pequeñas cosas, que a menudo podemos olvidar agradecerle a Él… pero realmente son las cosas más grandes e importantes en esta vida. Nos quita la atención de nuestros problemas y nos ayuda en cambio a reflexionar, a recordar, la bondad de sus muchas bendiciones.
– Nos recuerda que Dios es el Dador de todos los buenos regalos. Nunca se pretendió que fuéramos totalmente autosuficientes en esta vida. Un corazón agradecido nos recuerda que, en última instancia, Dios es nuestro Proveedor, que todas las bendiciones y dones nos son dados graciosamente por Su mano.
– Un corazón agradecido no deja lugar a la queja. Porque es imposible estar verdaderamente agradecido y lleno de negatividad y desagradecimiento al mismo tiempo.
– Hace huir al enemigo. Las fuerzas de las tinieblas no soportan estar cerca de corazones que dan gracias y honran a Dios. Nuestra alabanza y acción de gracias les hará huir.
– Abre la puerta a las bendiciones continuas. Invita a su presencia. Nuestros espíritus son refrescados y renovados en Él. Dios ama dar buenos regalos a sus hijos. Se deleita en nuestro agradecimiento y derrama su Espíritu y favor sobre aquellos que le dan honor y gratitud.
21 versos de agradecimiento de la Palabra de Dios:
«Oh, venid, cantemos de gozo al Señor; Gritemos con alegría a la roca de nuestra salvación. Lleguemos a su presencia con acción de gracias; ¡hagamos un ruido alegre para él con cantos de alabanza! Porque el Señor es un Dios grande, y un Rey grande sobre todos los dioses». Salmo 95:1-3
«¡Entrad por sus puertas con acción de gracias, y por sus atrios con alabanza! Dadle gracias, bendecid su nombre. Porque el Señor es bueno; su amor firme es eterno, y su fidelidad por todas las generaciones.» Salmo 100:4-5
«Dad gracias al Señor porque es bueno, su amor es eterno.» Salmo 118:29
«Te daré gracias, Señor, con todo mi corazón; contaré todas tus maravillas.» Salmo 9:1
«Daré al Señor las gracias debidas a su justicia, y cantaré al nombre del Señor, el Altísimo.» Sal. 7:17
«Dejad que vuestras raíces se hundan en él, y que vuestras vidas se construyan sobre él. Entonces vuestra fe se fortalecerá en la verdad que se os enseñó, y rebosaréis de agradecimiento.» Col. 2:7
«Y que la paz de Cristo reine en vuestros corazones, a la que ciertamente habéis sido llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos.» Col. 3:15
«Dedíquense a la oración, velando y dando gracias.» Col. 4:2
«Toda buena dádiva y todo don perfecto viene de lo alto, bajando del Padre de las luces, con quien no hay variación ni sombra debida al cambio.» Santiago 1:17
«No se inquieten por nada, sino que en todo, con oración y ruego, con acción de gracias, presenten sus peticiones a Dios.» Fil 4:6
«¡Bendice al Señor, alma mía, y todo lo que hay en mí, bendice su santo nombre! Bendice al Señor, alma mía, y no olvides todos sus beneficios, que perdona toda tu iniquidad, que cura todas tus enfermedades, que redime tu vida de la fosa, que te corona de amor firme y de misericordia, que te sacia de bienes para que tu juventud se renueve como la del águila.» Salmo 103:1-5
«Dad gracias en toda circunstancia; porque ésta es la voluntad de Dios en Cristo Jesús para con vosotros.» 1 Tes. 5:18
«¡Oh, dad gracias al Señor, porque es bueno, porque su amor es eterno!» Salmo 107:1
«Dando gracias siempre y por todo a Dios Padre en el nombre de nuestro Señor Jesucristo», Efesios 5:20
«El Señor es mi fuerza y mi escudo; Mi corazón confía en él, y soy ayudado; Por eso mi corazón se alegra, Y con mi canto le daré gracias.» Sal. 28:7
«Alabaré el nombre de Dios con cánticos, y lo engrandeceré con acciones de gracias.» Salmo 69:30
«Dad gracias al Señor, porque es bueno, porque es eterna su misericordia. Dad gracias al Dios de los dioses, porque es eterna su misericordia. Dad gracias al Señor de los señores, porque su amor es eterno; al único que hace grandes maravillas, porque su amor es eterno; al que hizo los cielos con su inteligencia, porque su amor es eterno…» Sal. 136:1-5
«Por lo tanto, ya que estamos recibiendo un reino que no puede ser sacudido, seamos agradecidos, y así adoremos a Dios aceptablemente con reverencia y temor, porque nuestro «Dios es un fuego consumidor.» Heb. 12:28-29
«¡Gracias a Dios por su inefable don!». 2 Cor. 9:15
«Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que es y el que era, porque has tomado tu gran poder y has comenzado a reinar.» Apocalipsis 11:17
«¡Amén! La alabanza y la gloria y la sabiduría y las gracias y el honor y el poder y la fuerza sean para nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén!» Apocalipsis 7:12
Querido Dios,
Gracias por tu asombroso poder y obra en nuestras vidas, gracias por tu bondad y por tus bendiciones sobre nosotros. Gracias porque eres Capaz de traer esperanza incluso en los momentos más difíciles, fortaleciéndonos para tus propósitos. Gracias por tu gran amor y cuidado. Gracias por tu misericordia y tu gracia. Gracias porque siempre estás con nosotros y nunca nos dejarás. Gracias por tu increíble sacrificio para que tengamos libertad y vida. Perdónanos cuando no te agradecemos lo suficiente, por lo que eres, por todo lo que haces, por todo lo que has dado. Ayúdanos a poner nuestros ojos y nuestros corazones en ti, de nuevo. Renueva nuestros espíritus, llénanos de tu paz y alegría. Te amamos y te necesitamos, hoy y todos los días. Te alabamos y te damos las gracias, porque sólo Tú eres digno!
En el nombre de Jesús,
Amén.
(Este post también apareció aquí: http://www.crosswalk.com/blogs/debbie-mcdaniel/the-power-of-a-grateful-heart-21-verses-of-thanksgiving.html)
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