Después de estar en antena durante tres temporadas, la cadena Oprah Winfrey (OWN) ha decidido desconectar el programa del pastor John Gray, The Book of John Gray, según informa TheGrio.
La noticia llega mientras Gray se enfrenta a dos demandas distintas, incluyendo una que intenta desalojarle a él y a su congregación de la propiedad de los pastores de la megaiglesia Ron y Hope Carpenter. El pasado mes de noviembre, los Carpenters, cofundadores del Redemption World Outreach Center en Greenville, Carolina del Sur, notificaron a Gray y a su iglesia la rescisión del contrato de arrendamiento. A Gray le dieron de plazo hasta finales del año pasado para abandonar la propiedad tras ser acusado de ser «turbio» y «deshonesto» en la ejecución de un acuerdo con los Carpenter después de que estos le pasaran las riendas de su Iglesia de la Redención en 2018, a la que luego rebautizó como Iglesia Implacable.
Además del desalojo, Gray ha estado recibiendo la mirada de lado de la gente que cuestiona su necesidad de mostrar su riqueza comprando a su esposa un Lamborghini de 200.000 dólares y viviendo en una casa de 1,8 millones de dólares que fue financiada en su totalidad por su Iglesia Implacable. Según The Christian Post, Gray defendió la compra del coche de su esposa: «En primer lugar, no fue un pastor el que compró el coche. Fue un marido el que compró el coche. Tenedlo en cuenta en vuestro espíritu. Primero soy un marido. No confundas lo que hago con lo que soy. Lo que hago es pastorear al pueblo de Dios. Lo que soy es un esposo y un padre. Y haré cualquier cosa para honrarlos. Y no pediré permiso a nadie para hacerlo. Ningún hombre debería hacerlo», dijo Gray, que también es pastor asociado en la iglesia Lakewood de Joel Osteen en Houston.
También se enfrenta a una demanda de un ex empleado, Richard Travis Hayes, que dice que Gray no le pagó 75.000 dólares que se le deben. Según los informes, a Hayes nunca se le pagó el dinero que se le debía después de que dejó la iglesia en diciembre de 2019. Afirma que se le deben casi 40.000 dólares en compensaciones no pagadas, más de 12.000 dólares en vacaciones no pagadas y más de 23.000 dólares que se le deben en un aumento salarial ofrecido en mayo de 2018.