Infanticidio

Infanticidio: la violación del Derecho a la Vida

El infanticidio es un acto que va directamente contra el Derecho a la Vida de los niños. Aunque en el pasado era más común, hoy en día todavía podemos encontrarnos con casos de infanticidio, sobre todo contra las niñas (infanticidio femenino).

¿Qué es el infanticidio?

El infanticidio es el acto de causar deliberadamente la muerte de un niño muy pequeño (menor de un año).

En el pasado, y en muchas sociedades, era una práctica muy extendida, permitida por diferentes culturas de todo el mundo. Hoy en día, se considera un crimen poco ético; sin embargo, se sigue realizando.
En algunas culturas, los niños no se consideran seres humanos hasta que se han realizado ciertas ceremonias (ceremonias de entrega de nombres o cortes de pelo, por ejemplo). El infanticidio se produce en raras ocasiones una vez que se han celebrado esas ceremonias, pero matar a un niño antes de ellas no se considera un homicidio.

El infanticidio suele ser difícil de denunciar, porque en la mayoría de los casos estas muertes se cubren como mortinatos o simplemente los niños no se inscriben en el registro civil después del nacimiento.

Tipos de infanticidio

Infanticidio directo o activo

El infanticidio directo o activo es matar al bebé deliberadamente, mediante deshidratación o inanición, asfixia o lesiones en la cabeza.

Infanticidio indirecto o pasivo

El infanticidio indirecto o pasivo comienza con una nutrición inadecuada, negligencia o descuido de los padres, especialmente cuando el bebé enferma.


A veces, dependiendo de las circunstancias, no hay una distinción clara entre infanticidio y aborto. Por ejemplo, entre los yanomamis de Brasil, cuando se produce un embarazo no deseado, se anima a la mujer a trabajar durante el sexto o séptimo mes de su embarazo, y luego se mata al feto si da señales de vida después de nacer.

Causas

Control de la población

En muchas sociedades, sobre todo en el pasado, el infanticidio se utilizaba habitualmente como una forma de controlar y regular la población. Como tal, afectaba especialmente a las niñas, ya que tener menos mujeres significaba tener una menor tasa de reproducción (menos hijos).

Embarazos no deseados

Los embarazos no deseados son la causa más común de infanticidio en la actualidad. Esto puede deberse a que las mujeres o las familias no tienen suficientes recursos para cuidar de sus hijos y a que, en muchas partes del mundo, no hay acceso a formas modernas de control de la natalidad o al aborto médico. Así, muchas mujeres experimentan embarazos no deseados, o simplemente quieren un determinado tipo de hijo, con características específicas, que creen que puede ser más útil en sus circunstancias.

Un estudio de Scheper-Hughes, publicado en 1992 y realizado en una favela de Brasil durante un periodo de 25 años, reveló una media de 200 muertes por cada 1000 niños nacidos.

La mayoría de estas muertes se debieron a formas indirectas o pasivas de infanticidio. Las madres preferían que sus hijos fueran rápidos, inteligentes, activos y precoces en su desarrollo, y los niños que mostraban características opuestas, no recibían atención médica cuando estaban enfermos o se les daba menos comida que a sus hermanos, ya que se consideraba que mostraban menos aptitud para la vida.

Otra causa de infanticidio asociada a los embarazos no deseados pueden ser los nacimientos ilegítimos, lo que significa que el embarazo no es fruto de un matrimonio reconocido por la sociedad. En algunas culturas este tipo de nacimientos son altamente indeseables, ya que pueden deshonrar a una familia.

Creencias derivadas de causas biológicas

Algunas sociedades todavía realizan infanticidios debido a creencias derivadas de causas biológicas. Por ejemplo, en algunas comunidades de Benín (África) se mata a los niños que nacen con una discapacidad, ya que se atribuyen a su nacimiento efectos mágicos negativos o hechizos malignos. Las mismas creencias se aplican en los casos de nacimiento de gemelos y niños albinos. En el caso de los gemelos, a veces sólo se mata al segundo hijo o se entrega a otra familia (por ejemplo, el pueblo Quijo en Ecuador).

Infanticidio femenino

El infanticidio femenino es la forma más común de infanticidio, tanto en la actualidad como en el pasado. Esta práctica se debe principalmente al hecho de que, en algunas culturas, los varones son considerados socialmente más valiosos que las mujeres. Además, el infanticidio femenino está a veces relacionado con el control de la población.

Por ejemplo, el Informe Mundial de la ONU sobre la Violencia contra los Niños realizado entre 1.000 mujeres de la India reveló que el infanticidio era la causa del 41% de las muertes de niñas recién nacidas.


En China también se practica el infanticidio, principalmente debido a la política del hijo único (aunque ya existía antes), que establece que cada pareja sólo puede tener un hijo. Muchos padres prefieren abortar antes del nacimiento, si saben que el niño es una niña. Sin embargo, entre las personas que no tienen esta posibilidad, se puede realizar el infanticidio al nacer.

Esta práctica va directamente en contra del Derecho a la Vida debido al sesgo de género, viola especialmente los Derechos de las niñas.

El infanticidio y los abortos femeninos han provocado un gran desequilibrio entre los sexos en algunas regiones. En 2007, un informe de la ONU estimó que habían desaparecido aproximadamente 100 millones de niñas en todo el mundo, 80 millones de ellas en China e India. En el futuro, esto podría provocar un aumento del tráfico de niñas u obligar a las mujeres a casarse con más de un hombre.

Escrito por: Natalia López
Traducido por: Krzysztof Turczyn
Revisión por: Sophie Narayan

  • Red Internacional de Derechos del Niño (CRIN); Formas de violencia: Infanticidio
  • Paulo Sérgio Pinheiro; Informe mundial sobre la violencia contra los niños (ONU)
  • Marvin Harris; Introducción a la antropología general. Madrid: Alianza Editorial, 2009
  • N. Scheper-Hughes; Muerte sin llanto: la violencia de la vida cotidiana en Brasil. Berkeley, CA, EE.UU.: University of California Press, 1993

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