Empezando por el enfoque cultural del análisis de subculturas observado entre los jóvenes, esta investigación de campo realizada en una ciudad del oeste de Canadá examina los significados que nuestros sujetos otorgan a su pertenencia a un subgrupo de skinheads autodenominado apolítico. Nuestro estudio pone en tela de juicio una determinada imagen del movimiento skinhead. A pesar de las nociones preconcebidas de aparente homogeneidad, nuestra investigación demuestra que la subcultura de los skinheads es a la vez compleja y multidimensional, y que ofrece a sus miembros una selección de pautas de comportamiento y orientaciones ideológicas, aunque a menudo sean contradictorias. Nuestro análisis también sugiere que, lejos de ser profundamente polémicos o revolucionarios, los grupos de skinheads pueden ser un instrumento de reproducción de las relaciones sociales, en particular de las relaciones de género, raciales y étnicas.
Enmarcado en un enfoque de estudios culturales sobre subculturas juveniles y basado en la observación de participantes en una ciudad del oeste de Canadá, este estudio examina los significados asociados a la pertenencia a una rama autodenominada «no política» de la subcultura de los skinheads. A pesar de las imágenes populares que implican homogeneidad, el estudio muestra que la subcultura de los skinheads es compleja y multidimensional y que da cabida, aunque de forma a menudo contradictoria, a una serie de oportunidades de comportamiento e ideológicas para sus miembros. El estudio también sugiere que, lejos de ser resistentes o transformadores de manera significativa, los grupos de cabezas rapadas pueden representar un vehículo para la reproducción social, específicamente con respecto al género, la raza y la etnia.