Tacca chantrieri
Sinónimos: Flor murciélago, bigotes de gato, flor del diablo, Tacca integrifolia chantreieri.
La Planta del Murciélago Negro es una planta muy inusual de la familia del ñame (Dioscoreaceae), cultivada por sus extrañas flores. Se encuentra de forma natural en el sur de China, la India y el sudeste asiático. Esta planta es claramente tropical. No soporta los períodos de frío prolongado y puede sufrir durante los períodos de baja humedad. Afortunadamente, la planta murciélago negro crece bastante bien en los jardines de Brisbane, siempre que esté en una zona sin heladas. Su prima más grande, la planta murciélago blanca (Tacca integrifolia) es mucho más sensible y puede necesitar protección en invierno, incluso en el sureste de Queensland.
La planta murciélago negra es una verdadera amante de la sombra. Crece de forma natural en el sotobosque húmedo y oscuro de las selvas tropicales. Reproduzca este entorno en el jardín cultivándola bajo la sombra de los árboles. Como alternativa, las plantas murciélago deben cultivarse bajo una tela de sombra (50-75% de corte), ya que no soportan el sol directo. No recomendamos esta planta para el interior, pero puede ser posible en el entorno adecuado.
Además de sombra, las Plantas Murciélago Negras necesitan buena tierra y humedad regular. Pueden ser difíciles de cultivar, así que asegúrese de que su suelo está bien drenado y se abona regularmente. Proporcione agua con regularidad en los meses de calor, pero deje que se sequen un poco en invierno, especialmente cuando haga frío. Fertilice de forma regular y ligera durante la temporada de crecimiento.
Las plantas murciélago negro necesitan una alta humedad para crecer de forma óptima. Plantar en un microclima húmedo alrededor de otras plantas. Las hojas pueden quemarse en los márgenes durante los períodos de aire seco. Las plantas murciélago sufren pocos problemas de plagas y enfermedades. Tenga cuidado con la cochinilla al final del verano. Las plantas que se mantienen demasiado húmedas y frías serán susceptibles de sufrir la podredumbre de las raíces y otras enfermedades fúngicas.