Resumen:
El narrador besa al oyente a modo de despedida. Le dice al oyente que está de acuerdo en que su vida ha sido un sueño, pero sugiere que todo «no es más que un sueño dentro de un sueño.» Se encuentra en la orilla del océano, sosteniendo granos de arena mientras llora. No puede evitar que la arena se le escape de la mano, y se pregunta si no podrá salvar ni siquiera un grano del oleaje.
Análisis:
La estructura de «Un sueño dentro de un sueño» consta de dos estrofas que contienen dos escenas dispares pero conectadas en última instancia. La primera estrofa muestra el punto de vista en primera persona del narrador separándose de una amante, mientras que la segunda sitúa al narrador en una playa mientras intenta inútilmente coger un puñado de arena con la mano. Las escenas yuxtapuestas contrastan de varias maneras, ya que el poema pasa de una despedida tranquila, aunque solemne, a una segunda mitad más apasionada. Mientras que la primera estrofa presenta un acuerdo reflexivo, la escena de la orilla del mar contiene improperios como «¡Oh, Dios!» y exclamaciones angustiosas junto con preguntas retóricas desesperadas para reflejar el tormento en el alma del narrador.
A pesar de las aparentes diferencias entre las dos estrofas, están vinculadas a través de la similitud irónica de sus naturalezas evanescentes. En la primera imagen, el narrador está dejando a su amante, indicando un sentido de finalidad (y mortalidad) de su amor. Por su parte, los granos de arena que caen en la segunda estrofa recuerdan la imagen de un reloj de arena, que a su vez representa el paso del tiempo. A medida que la arena fluye hasta que todo el tiempo ha pasado, el tiempo de los amantes también desaparece, y tanto la arena como el romance se convierten en impresiones de un sueño. A través de la aliteración en «granos de la arena dorada», Poe enfatiza la naturaleza «dorada» o deseada tanto de la arena como del amor, pero muestra claramente que ninguno de los dos es permanentemente alcanzable.
Como muchos de los poemas de Poe, «Un sueño dentro de un sueño» utiliza el mar como escenario para una discusión sobre la muerte y la decadencia. «La ciudad en el mar» ilustra la imaginería de un mar despiadado con mayor claridad, con las alusiones góticas al fin del tiempo, y en «Un sueño dentro de un sueño», la «orilla atormentada por el oleaje» se convierte en una segunda metáfora del tiempo, ya que las aguas del mar golpean lenta pero inexorablemente la existencia física de la orilla. El narrador considera que la ola es «despiadada», pero además se asocia con la naturaleza temporal del agua al llorar junto con la caída de la arena.
Aunque las dos estrofas no son idénticas en longitud, su uso similar de un ritmo yámbico y de pareados y trillizos en su esquema de rima final crea un patrón que coincide con el paralelo de sus ideas. En particular, los versos del estribillo «All that we see or seem/Is but a dream within a dream» (Todo lo que vemos o parece/no es más que un sueño dentro de un sueño) unen los pasajes en la conclusión del poema de la futilidad y el arrepentimiento ante el movimiento del tiempo. Poe llama la atención sobre «todo lo que vemos o parece» con la aliteración, y podemos ver esta frase como la combinación de dos aspectos de la realidad, donde «todo lo que vemos» es lo externo y «todo lo que parece» es el elemento interno. Al afirmar que ambos lados son la también aliterada frase «un sueño dentro de un sueño», Poe sugiere que ninguno es más real que un sueño.
Como título, la frase «un sueño dentro de un sueño» tiene un significado especial para cualquier interpretación del poema. Poe toma la idea de una ensoñación y la retuerce para que la percepción de la realidad por parte del narrador se produzca a dos grados de distancia de la realidad. En consecuencia, esta realidad se refleja sobre sí misma a través del medio del sueño, y el narrador ya no puede distinguir la causalidad en su percepción. Al mostrar la angustia del narrador ante sus observaciones, Poe magnifica los riesgos de la incertidumbre y de los posibles cambios en su identidad. El tiempo es una fuerza poderosa pero misteriosa que promueve la disonancia cognitiva entre el yo del protagonista y sus capacidades de comprensión, y la ensoñación resulta haberle atrapado. Alternativamente, el propio poema puede ser visto como el sueño exterior, donde el sueño interior es simplemente una función de la mente del narrador.