Después de 13 años de gastronomía en el Valle de Napa, el chef Richard Reddington cerrará las puertas de su restaurante homónimo, Redd, después del servicio el 7 de octubre.
El restaurante abrió allí como uno de los pocos restaurantes de lujo de la pequeña ciudad de Yountville en ese momento, uniéndose al French Laundry como un destino gastronómico elevado.
«No iba a venir a Yountville a competir con Thomas Keller en el ámbito de la restauración súper fina, así que sólo quería un lugar que fuera un poco más informal, de alta cocina, pero no pretencioso, y quería un bar divertido para atraer a los lugareños», dijo Reddington a Eater SF en 2015, después de una remodelación del restaurante para marcar diez años en el negocio.
Ayudado por los cócteles y una amplia lista de vinos, Redd se convirtió en un lugar de encuentro para los lugareños y los turistas por igual a lo largo de los años, con un patio acogedor, un bar pequeño pero concurrido, y un menú de platos casuales -pero elevados- de alta cocina. Entre los platos estrella de Redd se encuentran la panza de cerdo glaseada con puré de manzana, bardana y caramelo de soja, y el risotto con langosta, limón confitado y aceite de trufa blanca; el bao de panza de cerdo que se sirve en el bar se ha convertido en un clásico con el paso de los años.
Ahora, Reddington está listo para abrir un nuevo capítulo: Se está convirtiendo en bicostal, construyendo una casa en el norte del estado de Nueva York y dividiendo el tiempo con Yountville, donde seguirá siendo socio de su restaurante italiano informal, ReddWood.
«Pasé muchos años yendo y viniendo entre los dos restaurantes, nunca me perdía un sábado por la noche», dijo Reddington a Eater. «A medida que te haces mayor, es como ‘¿qué es lo que realmente me va a hacer feliz?’ En un cierto punto tienes que dar un paso atrás. Ahora puedo ir a ver a mis sobrinas jugar al fútbol y al baloncesto. Intento encontrar un mejor equilibrio».
No se puede subestimar el impacto de Reddington en la escena gastronómica de Yountville. Después de trabajar en algunos de los mejores restaurantes de la zona de la bahía -incluyendo el ya cerrado Postrio de Wolfgang Puck, como chef de apertura del Jardiniere de Traci Des Jardins, La Folie, y más- el chef fue atraído al norte por un buen amigo, el chef Thomas Keller. Juntos, sus restaurantes han cambiado el paisaje de la pequeña ciudad, que ahora es un destino para los turistas amantes de la comida de todo el mundo, y una atracción para otros talentos culinarios.
Después de 13 años, la reciente muerte del socio de Reddington, y la salida de los miembros clave del personal, el chef sintió que era el momento adecuado para seguir adelante. El inmueble de primera categoría que alberga a Redd saldrá a la venta próximamente. «No se puede mirar atrás, sólo se mira hacia adelante», dice Reddington. «Será divertido entrar en mi restaurante y ver en qué se convierte; sólo espero que no sea una cadena»
Reddington está trabajando actualmente en un proyecto en Nueva York, algo más pequeño y de ritmo más lento que Redd. «Para mí, es algo positivo», dice Reddington. «Tienes que cerrar una puerta antes de poder abrir otra»
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