Activismo social

Carreras en el activismo social–Una introducción

El activismo social es una acción intencionada con el objetivo de provocar un cambio social. Si te sientes muy identificado con una causa y trabajas por un cambio, puedes ser considerado un activista. Un activista es cualquier persona que lucha por un cambio en la sociedad. Un activista puede ser un estudiante que asiste a una manifestación contra la subida de las matrículas, un político que lucha contra los abusos internacionales de los derechos humanos o la madre de un niño muerto por un conductor ebrio que habla a los estudiantes sobre el consumo de alcohol y la conducción. Los activistas sociales se plantean un panorama más amplio: cómo pueden encontrar formas de acabar con la injusticia y crear comunidades fuertes que fomenten la salud económica, social y psicológica.

Mientras que el trabajo de los servicios sociales se ocupa de las necesidades de los individuos, la acción social se fija más en las causas profundas de esas necesidades y trata de encontrar formas de eliminarlas. Por ejemplo, en lugar de trabajar directamente con las personas sin hogar, un activista social podría trabajar para descubrir las condiciones que dificultan que la gente trabaje y se pueda permitir un lugar donde vivir. En lugar de trabajar en una clínica con una alta incidencia de leucemia, el activista social trabaja para descubrir el origen de los productos químicos tóxicos y para responsabilizar a los contaminadores del aumento de los riesgos para la salud de un vecindario.

Si definimos la justicia social como la creencia en un mundo equitativo y compasivo en el que se entienden, valoran y respetan las diferencias, entonces podemos ver que el activismo social y la justicia social son las dos caras de la misma moneda. El trabajo de acción social es una forma de alcanzar el objetivo de la justicia social.

Opciones de carrera en el activismo social

Hay muy pocas carreras que puedan definirse específicamente como carreras «activistas». La clave para crear una carrera en el activismo es encontrar formas de llevar tus creencias y valores a tu trabajo. Prácticamente cualquier carrera puede incorporar un elemento de activismo si se trabaja por el cambio social.

Combinar el activismo con tu elección de carrera puede requerir creatividad e ingenio por tu parte. Por ejemplo, podrías ser profesor y contribuir al activismo enseñando a tus alumnos sobre temas medioambientales, de derechos humanos y globales. Como médico podrías dedicar tu carrera a ofrecer servicios médicos a los niños de las zonas empobrecidas. O como director de una agencia de empleo, podrías orientar los esfuerzos de tu organización a ayudar a las personas sin hogar a encontrar trabajo.

Aquí tienes algunos ejemplos de carreras que puedes seguir y que incluyen claramente un elemento de activismo social:

Derecho y políticas públicas: dentro de la profesión jurídica, áreas como el derecho de los derechos humanos y el derecho de interés público son carreras activistas obvias. De hecho, muchas áreas del derecho podrían incluir aspectos de activismo.

Trabajo Social – los trabajadores sociales trabajan en diferentes capacidades tanto en el sector público como en el privado para presionar a los gobiernos, proporcionar asesoramiento y participar en proyectos de investigación, desarrollo y evaluación que todos trabajan para hacer cambios en el sistema más amplio.

Gobierno e Internacional – presionar al gobierno para lograr cambios, tanto a nivel nacional como internacional, es otra forma de activismo social. Uno de los caminos más claros es trabajar para la ONU en los esfuerzos de pacificación.

Medio ambiente – trabajar por la sostenibilidad del medio ambiente es crucial para mantener el mundo para nosotros y las generaciones futuras. Cualquier trabajo que tenga como objetivo la protección del medio ambiente puede considerarse el trabajo de un activista.

Organización comunitaria: el objetivo de la organización es potenciar y desarrollar el liderazgo de la comunidad local y ayudar a construir la capacidad de una comunidad para satisfacer sus propias necesidades. Los organizadores ayudan formando grupos para aumentar el poder político y crear una voz para mejorar las condiciones de las comunidades. Las tácticas incluyen campañas en los medios de comunicación, boicots y demandas colectivas. La organización consiste en obtener acceso a más poder.

Habilidades recomendadas

Algunas de las habilidades interpersonales necesarias para el trabajo de servicio social también son necesarias en el activismo social. Es importante ser capaz de trabajar con muchos tipos diferentes de personas, tener excelentes habilidades de comunicación, así como tener la capacidad de persuadir. También se necesita entusiasmo y perseverancia. Ayuda tener la capacidad de analizar los problemas subyacentes, ser capaz de elaborar estrategias y prever una sociedad mejorada.

Prácticas y oportunidades de trabajo–Activismo social

Idealist.org te conecta con decenas de miles de organizaciones comunitarias y sin ánimo de lucro en 165 países; también tiene un excelente centro de carreras sin ánimo de lucro, con cientos de listados de trabajos y prácticas
Naciones Unidas ofrece información sobre cómo trabajar para la ONU.
La bolsa de trabajo de Derechos Humanos enlaza con las principales organizaciones gubernamentales y no gubernamentales que se ocupan de los derechos humanos
Amnistía Internacional y lista de empleos y prácticas
Moving Ideas enlaza con sitios web progresistas que incluyen listados de empleos y prácticas
Estudios de Paz y Seguridad Mundial, sitio de base local que ayuda a encontrar empleos y prácticas en estudios sobre la paz
Carreras sin fronteras empleos en desarrollo internacional y ayuda humanitaria
Trabajos y prácticas de Human Rights Watch

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