ABSTRACT
El fordismo es un concepto central en la historia laboral estadounidense. Este ensayo, la primera revisión de la gama de enfoques historiográficos y sociológicos desplegados para entender el fordismo, sugiere que el fordismo y el americanismo están inseparablemente entrelazados. Los estudiosos anteriores han subrayado que la eficiencia tecnológica y de gestión de la práctica fordista era un sello distintivo del americanismo del siglo XX. Los historiadores del trabajo han demostrado que estos aspectos se manifestaron como un sistema implacable de control en el lugar de trabajo que, paradójicamente, contribuyó a unificar la resistencia de los trabajadores. Los historiadores del capitalismo han tendido a utilizar el fordismo para referirse a un ethos que sustenta el desarrollo capitalista de mediados del siglo XX, marcado por un equilibrio entre la producción y el consumo de masas. Identifican el aumento de las disposiciones sociales y el compromiso de clase entre los trabajadores y la dirección como características que hicieron que el fordismo fuera atractivo para los Estados que reconstruían sus economías tras la Segunda Guerra Mundial. Las nuevas historias transnacionales del fordismo han empezado a tender un puente entre estas dos interpretaciones principales para mostrar cómo la práctica y el ethos fordistas se exportaron juntos a nivel internacional como parte de un proyecto ideológico para modernizar las naciones a imagen y semejanza de Estados Unidos. Este ensayo concluye evaluando la utilidad del fordismo para los historiadores y sugiriendo vías para futuras investigaciones.