¿Es saludable la leche de almendras?
La leche de almendras se considera saludable ya que está llena de minerales y vitaminas de forma natural, como la vitamina E. Es más baja en calorías que la leche láctea, con sólo 30 calorías por taza. También es más baja en grasa y azúcar. Las variedades de leche de almendras sin endulzar son muy bajas en hidratos de carbono y tienen un IG bajo, lo que las hace aptas para los diabéticos y los que siguen dietas bajas en hidratos de carbono. Sin embargo, la leche de almendras no tiene el mismo valor nutricional que las almendras, ya que se mezcla con agua y se cuela, por lo que pierde las proteínas, la fibra y las grasas saludables que se encuentran en las almendras enteras.
Cuando se compara con la leche láctea, la leche de almendras no es tan nutritiva como otras leches de origen planetario, como la leche de soja. La leche de almendras, por ejemplo, no contiene calcio de forma natural, aunque éste se suele añadir como fortificación antes de su venta. También es más baja que la leche láctea en proteínas, pero de nuevo, muchas marcas se lo añaden.
¿Es la leche de almendras mala para el medio ambiente?
El impacto medioambiental de la leche de almendras, y de todas las demás leches, se compara a menudo en los estudios. Los dos mayores problemas asociados a la producción de leche de almendras son el agua y el uso de pesticidas. Mientras que los estudios han demostrado que la leche láctea es la que produce más emisiones, uso de la tierra y del agua, en lo que respecta a las leches de origen vegetal, la leche de almendras es la peor en cuanto al uso del agua. Sin embargo, la leche de almendras requiere poco espacio para su cultivo y es la que menos omisiones produce de todas las leches no lácteas. Como con la mayoría de las opciones, hay aspectos positivos y negativos.